La ciencia de hablar en público

Hace tiempo descubrí en LinkedIn los artículos de Nancy Duarte, escritora, diseñadora gráfica, y desde hace tiempo experta en comunicación.

Desde hace años es la fundadora de una de las compañías de presentaciones más importantes del mundo, www.duarte.com, pero no os penséis que hacen simplemente ppt’s. En su currículum figura entre otras cosas haber ayudado a Al Gore con las famosas presentaciones de An Inconvenient Truth.

El otro día sin ir más lejos, regalé a mi buen amigo Pablo el libro Resonate, donde Duarte explica cómo hacer vibrar a una audiencia con nuestro discurso.

El enfoque de Duarte es sorprendentemente científico, y artístico a la vez. En el libro encontraremos casos de estudio donde analiza paso a paso discursos tan míticos como la presentación del iPhone por Steve Jobs, o el famoso I have a dream, de Martin Luther King.

Los discursos son analizados mediante líneas temporales, marcando el tipo de mensaje en cada momento, hitos del discurso, reacciones de la audiencia…

Mediante estas líneas temporales, podemos vislumbrar una estructura común en esos discursos que cautivan al público.

Nancy Duarte dió una conferencia TED, que podéis ver más abajo, donde explica su método de análisis, y nos da pautas que podremos utilizar para hacer vibrar a la audiencia.

El libro no tiene desperdicio, y el enfoque, a la vez científico y artístico, es apasionante.

P.D. Duarte tiene también otro libro altamente recomendable, Slide:ology, sobre el arte de diseñar presentaciones.

Como temazo…mmm…por el título me parece apropiado Deconstruction, de nuestros amigos, Fanfarlo.

El Sentido de la Vida. Tú decides

¿Para qué vivimos?

Vaya pedazo pregunta, ¿eh? Estas tres palabras pueden poner patas arriba toda nuestra vida. ¿Para qué vives tú?

Recuerdo que en el colegio, cuando todavía se estudiaba filosofía, me enseñaron que el fin último del hombre es ser feliz. Ya antes os he introducido el concepto moderno de Felicidad Sintética. Pero ahora vamos a buscar el sentido de la vida. 

Qué mejor para explicarlo, que Viktor Frankl, autor de El Hombre en Busca de Sentido. Libro de lectura indispensable… indispensable para todo el mundo. Así…tal cual.

Viktor Frankl fue un médico y psiquiatra que sobrevivió a cuatro campos de concentración nazi, entre ellos Auschwitz. Al salir desarrolló una nueva rama de la psiquiatría, la Logoterapia, que busca el Sentido de la existencia.

En su calvario, observó que aquellos que tenían un propósito por el que vivir, sobrevivían por difíciles que fueran las circunstancias. Experimentó que el hombre aun despojado de todo, hasta su dignidad, puede aún decidir su actitud con la realidad.

La clave es que el hombre tiene LIBERTAD para DECIDIR su ACTITUD ante la realidad, por dura que sea. Esa libertad, es la que le da sentido y propósito a la vida. 

Es importante no obstante, encontrar nuestro propósito. Para ello hay que trascender y salir de la existencia de uno mismo. La salvación del hombre, sostiene Frankl, está en el amor y a través del amor.

Frankl solía decir, «quien tiene un porqué para vivir, encontrará casi siempre el cómo».

Resumiendo:

Tienes la libertad para decidir tu actitud ante la realidad, y así alcanzar tu propósito y dar sentido a tu vida.

Os dejo unas joyas de vídeos. El propio Viktor Frankl explicando la búsqueda del Sentido.

[NOTA IMPORTANTE: Algunos me han comentado algún post sin ver los vídeos enlazados. Ojo! Los videos que os enlazo son FUNDAMENTALES (las canciones no, son temazos simplemente), pero los videos son realmente útiles.]

Emocionante la pasión con la que habla en el primer vídeo.

Este con subtítulos en español

Y como temazo… What’s this life for, de Creed.

The Choose Generation

A la gente le encanta etiquetar las generaciones. La generación «baby-boom«, la generación «X«, la generación «Y» o «Millenials«… que son tan altísimos que yo les llamo la generación Actimel…

Sin embargo, si hay un rasgo distintivo del estado de bienestar actual de nuestra civilización, es que somos la Generación de la Elección, ó dicho en inglés que suena mejor… the Choose Generation.

El ser humano, en especial el Homo Sapiens del que venimos, ha evolucionado los últimos  200.000 años con una limitadísima capacidad de elección. ¿Qué quería hacer el Homo Sapiens con su vida? No le preocupaba lo más mínimo. Él tenía que sobrevivir día a día. Comer, reproducirse, dormir. Nuestro homínido tatatatatatara-abuelo, estaba en lo más bajo de la pirámide de Maslow.

Antiguamente si nacías tendero, morías tendero. Si tu padre era panadero, tú eras panadero. En el mismo siglo XX, el ser humano no ha podido dirigir su propia vida en muchas ocasiones. En EEUU, paradigma de la libertad, ya podías explicarle al tío Sam tus aspiraciones en la vida, que si te tocaba desembarcar en Omaha, o tomar la colina de la Hamburguesa de camino a Saigon, te tocaba y punto. Y eso no fue hace tanto tiempo.

Sin embargo ahora estamos en lo más alto de la pirámide. Nuestra capacidad de elección es muchísimo mayor que la de nuestros abuelos. Hace menos de un siglo eran impensables frases como «voy a cogerme un año libre para hacer un MBA, quiero dar un giro a mi carrera«, «no sé si irme a trabajar fuera«, «voy a poner mi propia empresa«…

Si bien hay que valorar lo alto que hemos llegado, el exceso de elección es un dardo envenenado. 30 tipos distintos de cereales pueden abrumar al cliente en el supermercado.

El exceso de posibiliades puede generar frustración. Por cada elección tomada, descartamos muchas más. «Podría estar en un trabajo mejor«, «podría salir con una chica más guapa«, «podría…», «podría…».

Aunque antes he dicho que ahora estamos en lo más alto de la pirámide de Maslow… no es del todo cierto. Esta crisis que sufrimos ha limitado nuestra capacidad de elegir. Ya no podemos elegir tanto nuestras carreras, nuestros destinos, controlamos menos nuestra vida, y esto es una frustración generalizada sobre todo en los más jóvenes.

Pero como explica Dan Gilbert, psicólogo de la Universidad de Harvard, una menor capacidad de elección… ¡nos hace más felices! Cuando tenemos menos posibilidades, nuestro cerebro elige ser felíz, en lo que Dan Gilbert llama la Felicidad SintéticaSynthetic Happiness. Parece absurdo, pero lo explica fenomenalmente bien en su charla de TED, Why Are We Happy?

Una auténtica joya, no os la perdáis.

Así que pensemos la inmensa suerte que tenemos. Estamos en lo mejor de los últimos 200.000 años del hombre. Y aunque es posible que nuestras posibilidades hayan menguado algo los últimos años, recuerda que está en tí la opción y la capacidad de ser felíz.

— Actualización:

Como bien dice mi amigo @andthenitmooned , lo suyo sería decir «Choice Generation«, pero es que Choose Generation me suena bien, y además ya lo he bautizado y la criatura se va a llamar así. ;-) Un abrazo Sr!